"Mi mejor amigo se llama Ludwig. Ludwing Lobo-Feroz. Es un tío genial. Por eso es mi mejor amigo. Sin embargo, a veces me saca de quicio. Oye ruidos raros y me echa a mí la culpa. Pero, en fin, no se lo tengo en cuenta. Ya sé que no hace aposta eso de oir esos raros-- Uy, perdón -- Serafín"--Cover, p. [4].